La ciencia y la tecnología podrían considerarse como "espada de doble filo", particularmente en vista de las actuales lagunas en los regímenes internacionales vigentes.
Los sistemas de educación formal que ha impartido históricamente el estado o las corporaciones religiosas o privadas han sido un arma de dos filos para los pueblos indígenas.
Se insinuó que la mejora en el índice de utilización general era un arma de doble filo, puesto que en la práctica hacía que hubiera menos recursos disponibles para las agrupaciones regionales y otras agrupaciones importantes.
Era necesario explicárselo, pero no se lo explicaban, ocupados como estaban en dar filo a los machetes comprados por la revolución en una ferretería que se quemó.
Tenían la forma de los dedos de un hombre cuando se crispaban como garras. Eran casi tan largos como los dedos del viejo y tenían filos como de navajas por ambos lados.