Además, todavía subsistían varios obstáculos jurídicos y administrativos para los inversores extranjeros, lo que reducía el potencial del país para atraer IED.
Una rebelión de trabajadores hizo que los inversionistas se fueran con todas las ganancias de explotar la tierra y dejaran al pueblo nuevamente en la miseria.
El comunicado indica que se harán más esfuerzos para animar a los inversionistas privados a explorar oportunidades en sectores amigables con el medio ambiente.
Además, en medio de la crisis, los grandes inversores no están destinando fondos a start ups tecnológicas, que son otros de los clientes estrella del banco.
La Secretaria Ejecutiva recalcó que es del interés de los inversores animar a los gobiernos a seguir formulando políticas respetuosas del medio ambiente y acelerar su desarrollo.
Y esto fue lo que asustó a los inversores y clientes, pues esa venta con pérdidas la interpretaron como una señal del mal estado de las cuentas del banco.
Al tiempo que los lazos entre África y China se hacen más cercanos, se espera que en los próximos años cada vez más inversionistas exploren los mercados africanos.