En la mini reunión ministerial de Dalian se observó que era necesario encontrar un término medio entre la fórmula suiza y la fórmula de la Ronda Uruguay.
No obstante, esas delegaciones consideraron que la idea de ofrecer al Estado anfitrión la posibilidad de no aplicar el protocolo facultativo a dichas situaciones constituiría un compromiso aceptable.
Se consideró asimismo que el texto de transacción podría crear incoherencias o confusión en los países que hubieran adoptado o que desearan adoptar la Ley Modelo sobre Arbitraje.
Cuando le expliqué mis razones al capitán, le parecieron justas y me propuso lo siguiente: que se comprometía a darle al chico un testimonio por el cual obtendría su libertad en diez años si se convertía al cristianismo.