Somalia sigue siendo muy vulnerable a los desastres naturales, en particular a la sequía y las inundaciones, así como a los ciclones y las tormentas costeras estacionales.
El Iraq también conviene en que las zonas costeras de zanjas y depósito de petróleo son posibles fuentes de origen del petróleo que afecta a esos lugares.
Doy las gracias a las Naciones Unidas y a la comunidad internacional por haber aportado generosas contribuciones a las tareas de socorro en los Estados del Golfo sudoriental.
Recordemos el secuestro, en junio de este año, de un buque del Programa Mundial de Alimentos que transportaba asistencia alimentaria surcando las aguas de la costa de Somalia.
Los pequeños Estados insulares en desarrollo señalaron posibles pérdidas agrícolas y efectos devastadores en las comunidades y la infraestructura costeras como consecuencia del aumento del nivel del mar.
El Gobierno todavía no tiene la capacidad de vigilar sus aguas territoriales para evitar actividades de pesca ilegales ni de impedir que navíos extranjeros viertan desechos frente a sus costas.
Según el Iraq, existen muchas otras fuentes posibles de contaminación por petróleo en el Golfo que pueden explicar igualmente o incluso mejor la presencia de petróleo en la costa iraní.