De hecho, hemos podido aumentar la asistencia considerablemente, tal y como muestran las cifras, y no retenemos ningún artículo tan pronto como podemos.
Nuestro cerebro interpreta los hábitos disminuyendo la actividad cerebral requerida para desempeñar la tarea en cuestión, de modo que la automatiza, resultando esta considerablemente más fácil.
Además, entendiendo que desarrollos de software llevados adelante por universidades locales son de un costo considerablemente menor que el de tratar de comprar tecnología extranjera.
También les envié cinco vacas de Brasil, tres de la cuales estaban preñadas, algunas ovejas y cerdos, que se reprodujeron considerablemente, como pude apreciar a mi regreso.
Emprendí el viaje con él y me llevé, una pequeña cantidad de mercan cía que, gracias a la desinteresada honestidad de mi amigo el capitán, pude acrecentar considerablemente.
Desde entonces han aumentado considerablemente los casos diagnosticados: no porque cada vez haya más, sino porque cada vez hay más conciencia entre los padres y las herramientas de diagnóstico mejoran.
Claro, el impacto ambiental de las hidroeléctricas depende mucho de su tamaño y hasta hay quienes dicen que con una buena planeación, las represas pequeñas pueden reducir considerablemente los impactos negativos.
Cuando revisé mi provisión de pan, me di cuenta de que había disminuido considerablemente, por lo que me limité a comer solo una galleta al día, cosa que me provocó mucho pesar.
Para amparar a los agentes del mercado, es imprescindible aumentar considerablemente la accesibilidad de las pymes y las microempresas a los préstamos, y, al mismo tiempo, reducir sustancialmente el coste general de la financiación.
Después del cambio, la tasa de paridad central del RMB, se debilitó considerablemente el mismo martes en 1.136 puntos básicos, o cerca del 2 por ciento, para situarse en 6.2298 frente al dólar.
En la escala de calificación más alta, las zonas calvas se agrupan y se expanden considerablemente, finalmente dejando solo un anillo de escaso pelo alrededor de las sienes y la parte posterior de la cabeza.
Pese a que la tormenta había disminuido considerablemente, las gigantescas olas rompían tan descomunalmente en la orilla, que bien se podía decir que se trataba de Den wild Zee, que en holandés significa tormenta en el mar.