No podemos volver la espalda a esos valores básicos ni a los deberes que imponen a todos los países y Gobiernos. De hacerlo, devaluaríamos nuestra condición humana.
Unas leyes, que habían resuelto problemas, vayan a ser modificadas por leyes de partido, leyes de la ultraderecha, que lo que van a hacer es devaluar, demonizar y desproteger a estas personas.
Los argentinos empiezan a medir hoy los efectos de las medidas decretadas anoche por el gobierno de Milei: ha devaluado su moneda más de un 50%, suspendido la obra pública nueva y recortado subsidios a la energía y el transporte.