Blood aclara que el catálogo también incluye piezas más humildes, elaboradas a mano, por simples ciudadanos cuyo mensaje es suficientemente mordaz o significativo.
Tras estas manifestaciones se aprobó la llamada Ley Mordaza, que entre otras cosas incluyó multas de entre 300.000 y 600.000 euros por manifestarse alrededor de sedes parlamentarias.