El más clásico es el tablao flamenco, normalmente un espacio relativamente pequeño con un escenario rectangular elevado y las sillas de los espectadores dispuestas alrededor.
Sin embargo, lo más extraño era la gran roca en forma de prisma rectangular que ocupaba el centro de la estancia, iluminada de modo tenue por varias lamparitas.
Si bien los romanos tomaron las columnas dóricas, jónicas y corintias, así como la simetría y las ventanas rectangulares de los griegos, agregaron arcos y cúpulas a sus construcciones.
A partir del año 2000 en España se empezó a construir muchas viviendas, por eso se llama la crisis del ladrillo, porque los ladrillos son estos materiales rectangulares con los que se crean viviendas.