El vídeo se hizo viral en cuestión de horas, y esta calle, la Roque Guinart, ya celebra el nacimiento del que consideran el nuevo justiciero del barrio, por poner el foco en la falta de aparcamientos.
Infinitas y bien dichas fueron las razones con que los capitanes agradecieron a Roque su cortesía y liberalidad, que por tal la tuvieron, en dejarles su mismo dinero.
Finalmente, Roque Guinart ordenó a los criados de don Vicente que llevasen su cuerpo al lugar de su padre, que estaba allí cerca, para que le diesen sepultura.