Quedaban apenas los muebles indispensables, los candelabros y el servicio de plata, porque los útiles domésticos habían sido vendidos, uno a uno, para sufragar los gastos de su educación.
" Muy poquito se sube, porque si no no vendemos" Ingresos que, aseguran las religiosas, no alcanzan, para sufragar los gastos de unos edificios y conventos que acumulan siglos de antigüedad.
Se prevee, y ya tenemos las primeras consultas al respecto, que los arrendadores vayan a aumentar las garantías exigibles, puesto que si tienen que sufragar un coste superior de mediacion, pues van a proteger que ese alquiler dure más tiempo.