Con teclas, cámaras de bajísima calidad, algunos todavía tenían antenas que tenías que sacar para tener señal… Y para pasar música tenías que usar tecnología completamente obsoleta, como el infrarrojo.
Desde los 19 años aprendió con un método muy peculiar: en unos baños públicos había una pianola, que es como un piano en el que las teclas se oprimen automáticamente.
Pero si me subo a esa escalerilla y me pones delante de un teclado con millones de teclas, millones y millones de teclas que no tienen fin, y ésa es la verdad, Max, no tienen fin.
El acordeón es un popular instrumento musical de viento formado por un fuelle y dos cajas en sus extremos con teclas que se toca abriendo y cerrando el fuelle y presionando las diferentes teclas que dan la musicalidad.