Mientras España realizaba sus exploraciones, el célebre explorador británico James Cook cartografiaba la costa noroeste en 1778, dejando una huella duradera en la toponimia de la región.
La toponimia actual de la costa entre California y las Islas Aleutianas conserva algunos nombres que recuerdan la presencia española, aunque no todos proceden directamente de esa época.
Sin embargo, la presencia española ya había dejado una marca imborrable reflejada principalmente en la toponimia, la arquitectura y, por supuesto, en el lenguaje local de estas regiones.