Lamento hacerlo, porque los comentarios realizados en el Salón del Consejo han sido sumamente alentadores para Bosnia y Herzegovina, y considero que ese país ha logrado avances auténticos y, de hecho, notables.
Me deprime la idea de que a los editores no les interese tanto el mérito del texto como el nombre con que está firmado, que muy a mi pesar es el mismo de un escritor de moda.