Según un orador, el seminario sobre el antisemitismo era “una medida muy adecuada para llegar a una situación en la que los judíos de todas partes considerasen que las Naciones Unidas eran también su hogar”.
En el periodo entre guerras, con el beneplácito inglés, la migración judía a Palestina continúa creciendo a un ritmo bestial por culpa del antisemitismo europeo que alcanza su culmen en el auge de los fascismos en Europa.