Sin embargo, como advirtió el filósofo Paul Virillio, con toda nueva tecnología surgen las posibilidades de nuevos accidentes, y con una mayor velocidad se presenta la amenaza de catástrofes cada vez más horrorosas.
Los creyentes y los filósofos agnósticos tienen derecho a exponer sus creencias, a tratar de convencer a otros para que las compartan e incluso a tratar de convertir a aquellos a quienes se dirigen”.
Si, como aseguran los filósofos, los pensamientos y las ideas se hacen realidad y el tiempo y la energía se transforman en obras y hechos concretos, entonces no me cabe duda de que esta vez tendremos éxito.