En consecuencia, funcionará como centro de apoyo (“centro de enlace”) para las organizaciones que trabajan para prevenir la mutilación genital femenina.
La mutilación genital femenina figura entre las prácticas tradicionales perjudiciales que se prohíben en virtud de la Ley, aunque no se la menciona especialmente.
En ese documento se prohíben todas las formas de violencia física y psicológica, la mutilación, los matrimonios tempranos o forzados y el acoso sexual.