Los desequilibrios económicos, en particular, imposibilitan que los países pobres y menos desarrollados alcancen los objetivos de desarrollo del Milenio.
Esta disparidad parece ser resultado de la ausencia de una masa crítica de capacidades o de disfunciones internas que reducen la calidad de la participación.
Eso ha traído consecuencias graves, tales como el desempleo, trastornos sociales, perturbaciones psicológicas y la trágica pérdida de divisas que se necesitan con tanta urgencia.
Según la Unión Europea, la ayuda está destinada a la capacitación profesional, que se considera como instrumento para reducir los desequilibrios económicos internos en el Territorio21.
Otro testigo informó sobre los efectos psicosomáticos que sufrían los niños, que no soportaban el ruido de los tanques, las excavadoras y los helicópteros a baja altitud.
La consulta y la participación de la comunidad desde las fases iniciales de los procesos de planificación reducirían los errores de planificación costosos y la creación de asentamientos disfuncionales.
En especial, el Comité recomienda que el Estado Parte intensifique las medidas encaminadas a abordar los trastornos de la alimentación y promover hábitos de vida sanos entre los adolescentes.
La brecha digital, que es un síntoma de un entorno mundial que padece varias disfunciones de carácter económico, social, político y cultural, constituye la expresión más endémica de la pobreza.
No obstante, esa noción no va acompañada del esfuerzo correspondiente para facultar a las Naciones Unidas a asistir a los Estados que atraviesan profundos trastornos económicos, desigualdades sociales y dificultades políticas.
20) Siguen preocupando al Comité los informes sobre fallas graves en la administración de justicia, en particular por falta de recursos humanos y materiales, así como la lentitud de los trámites.
Múltiples estudios han relacionado el comportamiento perfeccionista con enfermedades mentales comunes, como la depresión, la ansiedad o los trastornos alimentarios.
Y esos diagnósticos apresurados, a su vez, pueden terminar causando o exacerbando trastornos alimenticios que, muchas veces, terminan convirtiéndose en crónicos.