Además, se estimó que, para que fuera comercialmente viable, una definición de “firma electrónica” debía ser poco complicada y no resultar cara en la práctica.
En el apartado a) del párrafo 3 del artículo 9 se enuncian los criterios generales de equivalencia funcional entre las firmas manuscritas y las firmas electrónicas.
Ahora bien, es importante señalar que, al redactarse inicialmente esa disposición, la Ley Modelo contenía una norma que atribuía los mensajes de datos firmados al presunto firmante.
En los últimos años los Estados miembros de la OCDE iniciaron la elaboración y aplicación de políticas y leyes relacionadas con la autenticación y las firmas electrónicas.
Incumbe a las partes probar quién firmó un documento determinado, pero una vez probado esto, no necesitan probar nada especial en cuanto al método de firma propiamente dicho.
Se han hecho estudios grafológicos de cómo firma ella, por ejemplo, en las felicitaciones navideñas, y dicen que es una niña muy reservada, que es muy detallista.
Está bien -respondió Sancho-; pero la libranza forzosamente se ha de firmar, y ésa si se traslada, dirán que la firma es falsa, y quedaréme sin pollinos.
Pues uno de los renegados que he dicho era este mi amigo, el cual tenía firmas de todas nuestras camaradas, donde le acreditábamos cuanto era posible; y si los moros le hallaran estos papeles, le quemaran vivo.
No tuvo que romper el sobre, pues la goma se había disuelto con el agua, pero la carta estaba seca: tres folios densos, sin encabezado, y firmados con las iniciales del nombre de casada.