Nuestro pueblo ha trabajado con denuedo para recuperarse de la devastación sufrida por el país y reconstruir nuestras instituciones y nuestra base industrial.
Está haciendo verdaderos esfuerzos por aumentar la concienciación respecto de la Convención, pese a la tasa de analfabetismo del país, que llega al 80%.
Dinamarca acoge muy favorablemente la ardua labor que desempeñan ambos tribunales, y los alienta a que se esfuercen al máximo para cumplir los plazos previstos.