La educación es una cuestión global,es una cuestión colectiva.
La educación es lo que nos permite ser quienes queremos ser, o por lo menos pelear por ello.
Soy escritor gracias a la escuela pública,en concreto,a mi paso por un colegio, instituto y universidad públicos, que me permitieron acceder a una formación gracias a la cual hoy soy lo que soy.
Si no hubiera tenido acceso a esa formación no habría podido construirme.
Sí me interesaba mucho hablar de algo que me preocupa enormemente y,además, me preocupa también desde mi lado educador y lo he vivido dentro de las aulas, que es la segregación del alumnado.
El convertir determinados centros escolares en guetos, en lugares donde de alguna forma se reúne al alumnado con más problemas, con más conflictos,y a cambio se crean otros centros más elitistas.
Esa segregación a veces se hace de una manera evidente, a veces se hace de una manera implícita, tiene que ver con que en el fondo se quiere romper ese ascensor social que es la educación.
Si en un centro donde necesito más recursos que en otro no los facilito, es imposible que ese alumnado triunfe, es imposible que esos docentes puedan, con ilusión o con entusiasmo.
Y voy a esos centros como autor y vivo ese entusiasmo, y lo vivo de primera mano,pero por mucho entusiasmo que yo ponga, si yo no tengo medios y recursos con un alumnado que a veces tiene problemas para comprar un libro...
O que,a lo mejor, tiene problemas en su casa porque viven más personas de las que deberían en un espacio digno y porque no tienen ni un espacio minúsculo para estudiar, o para aprender,o para sentirse bien.