每日西语听力

当前播放

Buen Viaje Señor Presidente 总统先生,一路走好!(2)

Lazara Davis, su mujer, fue más realista.

Era una mulata fina de San Juan de Puerto Rico, menuda y maciza, del color del caramelo en reposo y con unos ojos de perra brava que le iban muy bien a su modo de ser.

Se habían conocido en los servicios de caridad del hospital, donde ella trabajaba como ayudante de todo después que un rentista de su país, que la había llevado como niñera, la dejó al garete en Ginebra.

Se habían casado por el rito católico, aunque ella era princesa yoruba, y vivían en una sala y dos dormitorios en el octavo piso sin ascensor de un edificio de emigrantes africanos.

Tenían una niña de nueve años, Bárbara, y un niño de siete, Lázaro, con algunos índices menores de retraso mental.

Lazara Davis era inteligente y de mal carácter, pero de entrañas tiernas. Se consideraba a misma como una Tauro pura, y tenía una fe ciega en sus augurios astrales.

Sin embargo, nunca pudo cumplir el sueño de ganarse la vida como astróloga de millonarios.

En cambio, aportaba a la casa recursos ocasionales, y a veces importantes, preparando cenas para señoras ricas que se lucían con sus invitados haciéndoles creer que eran ellas las que cocinaban los excitantes platos antillanos.

Homero, por su parte, era tímido de solemnidad, y no daba para más de lo poco que hacía, pero Lazara no concebía la vida sin él por la inocencia de su corazón y el calibre de su arma.

Les había ido bien, pero los años venían cada vez más duros y los niños crecían.

下载全新《每日西语听力》客户端,查看完整内容
点击播放