¿Sabían que tristemente y por primera vez en la historia, nosotros seremos la primera generación de padres que enterremos a nuestros hijos?
Y, ¿saben qué es lo peor?
Que nosotros somos los responsables.
Estamos maltratando a nuestros hijos todos los días, alimentándolos con alimentos ultraprocesados, llenos de azúcares, colorantes, saborizantes y demás aditivos químicos que no deben estar consumiendo ni ellos ni nosotros.
Pero al final de cuentas nosotros lo hacemos por decisión propia, a diferencia de ellos, que los consumen, porque nosotros les damos acceso ilimitado a todo eso.
Las estadísticas que refleja el INEGI son impactantes.
En México, uno de cada tres niños es obeso y 78.000 desarrollan diabetes tipo 2 cada año.
Imagínense que un niño de cinco años, de hoy, ya comió más azúcar que una persona que vivía hace 100 años comía en toda su vida.
Según Forbes, en 1990 la diabetes no figuraba como un problema de atención prioritaria.
Hoy es la causa número uno que causa discapacidad en México.