El latín ha pasado al español por la ley de economía lingüística, ¿no?
O sea, eso de que todo tiende a hacerse más fácil y corto.
Decir “subir arriba”, “bajar abajo”, “entrar dentro” está mal porque no cumple con esta ley, es redundante…
Pues todo esto… es mentira.
Las lenguas NO evolucionan así y la ley de economía lingüística no existe y os lo voy a demostrar.
Hola, buenas tardes.
Es una calurosa tarde de verano (o mañana, o de invierno, me da igual, tú decides), estamos en el siglo XIX, la corriente lingüística que se lleva en este momento es la escuela neogramática.
¿En qué se basa?
Pues en demostrar que los cambios fonéticos son regulares (o sea, lo que más me gusta a mí, todo pasa por algo y tiene su lógica).
Luego, pasa un tiempo, un siglo, y llega este señor: Saussure, que seguro que os suena, aunque sea solo el nombre.