A la cabeza iba Pedro de Alvarado con 28 soldados españoles de infantería, entre los que iba el futuro cronista Bernal Díaz del Castillo y acompañados de 30 jinetes.
Miren cuánta y cuán lucida caballería sale de la ciudad en siguimiento de los dos católicos amantes; cuántas trompetas que suenan, cuántas dulzainas que tocan y cuántos atabales y atambores que retumban.
En muchos lugares se organiza la llamada Cabalgata de los Reyes, en la cual los Reyes Magos van montados a caballo o en carrozas vestidos con mantos y coronas; y acompañados de otras carrozas con personjaes infantiles.