Se percibía como una de las principales causas de los problemas la falta en la Constitución de Egipto de una disposición concreta por la que se reconociera a los coptos como minoría y se previera su protección.
Subrayó que los egipcios eran un solo pueblo y que los coptos formaban parte del tejido de la sociedad egipcia; el concepto de minoría no era pertinente en la realidad egipcia ni era utilizado por los dirigentes coptos del país.