Era evidente que sus dueños habían intentado darles un aspecto lo más muggle posible, aunque habían cometido errores al añadir chimeneas, timbres para llamar a la puerta o veletas.
Despacito se ha convertido en un fenómeno popular, inspirando todo tipo de versiones, y parodias, muchas de ellas inspiradas en el empacho que tiene la gente con la canción.