Cómo es la figura de Leonardo cuando enseña a sus seguidores, y qué les enseña, y luego, qué es lo que ellos absorben o asimilan de sus enseñanzas.
La enseñanza de Leonardo o cómo él enseña a sus discípulos, se apoya sobre todo en el entrenamiento de la mirada, en enseñarles a observar, a reflexionar sobre lo que han observado antes de ponerse a pintar.
La colección del Prado nos permite el poder reflexionar sobre su figura como maestro y tanto las obras de la colección como las que hemos pedido, sintetizan cada uno de los hitos de esa instrucción que Leonardo va dando a sus colaboradores, si queremos llamarlos colaboradores, alumnos, o asociados durante muchos años, pero especialmente durante los años de estancia en Milán.
Yo creo que su pensamiento se sigue muy bien a través de sus dibujos y yo creo también que de ahí ese empeño en entrenar a los alumnos a través del dibujo.
Por otra parte son alumnos que cuando llegan a él ya están formados.
Cuando él plantea su enseñanza, una de las cosas que dice es que ya tienen que estar instruidos en perspectiva y en geometría, y posiblemente también en los rudimentos básicos de la pintura, es decir, él no puede perder tiempo en enseñarles a preparar un soporte o en enseñarles cómo se traspasa un dibujo a través de un cartón.
Leonardo incita siempre a sus alumnos a corregir todo lo que están haciendo.
Y a registrar, a que llevasen en el bolsillo siempre un pequeño cuaderno en el que ir representando las formas o las actitudes o las escenas que ellos veían durante sus paseos por las ciudades o sus paseos por el campo.
Y les decía además que luego se retiraran a pensar en ellas en solitario para que se quedasen muy bien grabadas en la memoria.
Y después les incitaba también a salir en grupo para hacer ejercicios en común y que unos se corrigieran a los otros.