A mí me gusta que cuando vean un retrato mío,si no conocen al personaje, tengan ganas de conocerlo.
Yo he trabajado casi siempre de encargo y si no,rentabilizando lo que hacía.
He sido una fenicia de la fotografía.
La culpa de que yo haga fotos la tiene mi papá.
Como era ingeniero industrial,no me regalaba chorradas,ni muñecas,ni cosas de estas.
Me regaló una pequeña cámara,que todavía la tengo,que es esta.
A mí me pareció eso el juguete más genial que se había inventado y entonces, a partir de ahora,con este cacharrito,pues fotografiaba todo lo que veía.
Las primeras fotos que hice en serio fueron las de Carmen Amaya en "Los Tarantos".
Carmen Amaya,se puede decir,fue mi primera clienta, la primera persona que me pagó por unas fotos.
Tuve la inmensa suerte de verla bailar y quedé prendada, no solamente del personaje porque Carmen era impresionante, sino del baile y del cante y la guitarra flamenca.