¡Muchas gracias por acogernos con tanto cariño y felicidades por este premio!
Acabamos de conocer a dos de los más ilustres, Pepín Corripio y Javier de Arroes.
Dos ejemplos de lo que el trabajo constante y la pasión son capaces de lograr.
El primero, un gran empresario que salió de su tierra siendo muy niño.
Y el segundo, alguien que mantiene viva la música tradicional asturiana.
Hemos disfrutado mucho con la interpretación de Vicente el Praviano y con las explicaciones sobre el Gaitero de Libardón que nos ha dado su nieto Manuel.
Y también hemos visitado el mercado de artesanías y productos de vuestra huerta que habéis preparado, antes de conocer lo que hacen los más pequeños en la escuela rural.
Y no me puedo olvidar de la sidra, que estamos en la comarca de las pomaradas.
Tenemos muchas ganas de ver ahora, en la sede de la asociación de vecinos, la iniciativa en la que jóvenes y mayores os unís para preservar la cultura, las tradiciones y el folclore.
Y comprobar cómo estáis revitalizando el territorio gracias a los avances tecnológicos y siempre con el respeto a la cultura local.
