Ahora nos vamos a quedar un ratito contemplando la belleza del glaciar y ya mañana nos toca el gran desafío de este viaje, remar el río más caudaloso de Chile, el Baker.
En Aragón, la falta de agua ha hecho que la Confederación Hidrográfica del Ebro haya declarado en situación extraordinaria al río Aragón, de los más caudalosos del Pirineo.