Fuimos a buscar tablas al desván y papá trajo sus herramientas. Rex se puso a comer begonias, pero es menos grave que el sillón del salón, porque tenemos más begonias que sillones.
No dejen el desván de Lorca sin fijarse en lo más valioso, el manuscrito del retablillo de Don Cristóbal y Doña Rosita, escrito específicamente para el estreno en Buenos Aires de 1934, con títeres.
En el desván encuentran un ejemplar de Afrovita, de Pierre Louis, y muchos números de una revista ilustrada con dibujos de caballeros en traje de etiqueta pellizcando a bailarinas de la ópera vestidas tan solo con un maillot y una faldita corta.