La infraestructura técnica, como las cañerías de abastecimiento de agua, las farolas y los postes de electricidad se habían retirado o se estaban retirando.
La consecuencia directa más obvia de la explotación minera sería la eliminación de los propios nódulos, que necesitarían millones de años para volver a crecer.
Los materiales fueron retirados tras la protesta de la Fuerza, pero las fuerzas turcas procedieron a construir un nuevo puesto de observación inmediatamente adyacente a la zona de amortiguación.