El té actualmente no cura venenos, pero la historia de Shennong, el mítico inventor chino de la agricultura, destaca la importancia del té en la China antigua.
Entonces, como siempre me apetece beberme alguno y a veces estoy en rodaje, bueno, pues me llevo mi botellita, que cuando no tengo té pues puedo rellenarla con agua y mi bolsita.
Tras cientos de años con variaciones del método de preparación, el estándar se convirtió en calentar el té, empaquetarlo en bloques portables, molerlo en polvo, mezclarlo con agua caliente y crear una bebida llamada muo cha, o matcha.