El reclamante afirmó que fue detenido durante 33 días y golpeado por soldados iraquíes durante la invasión y ocupación de Kuwait por el Iraq y que como consecuencia sufrió hipertensión, diabetes y problemas oculares.
Dado que en el informe no se indicaba la causa del problema de salud ni se relacionaba ese problema con la detención y el maltrato que se alega, el Grupo recomienda que no se conceda indemnización por las pérdidas D2 (lesiones corporales).